7 CONSEJOS PARA LIDERAR Y EMPODERAR TU VIDA
La belleza no es sinónimo de éxito ni un indicador de nuestros conocimientos e inteligencia.
El qué nos ponemos y cómo lo llevamos no debería de interpretarse en medios de comunicación ni a nivel social. Esto es lo que les pasa diariamente a mujeres que están en el poder.
Son muchos los estereotipos, discriminaciones y barreras por las que pasamos las niñas y mujeres. Pero aún son más los pasos por andar para que se haga realidad la igualdad de género. Por eso hoy te hablo del empoderamiento femenino, como tu herramienta personal para destruir los muros invisibles que conllevan nacer niña.
Ya sabemos por qué de los 193 países que hay en la Tierra sólo 10 están gobernados por mujeres1. Por qué el 90% de Jefes de Estado y de Gobierno son hombres o por qué el 76% de los parlamentarios son hombres2. También sabemos por qué el 85% de las empresas, a nivel mundial, están lideradas por ellos3.
Está demostrado que una mayor representación de mujeres en los gobiernos garantiza el progreso en las reformas de leyes discriminatorias y un aumento en la inversión en educación, salud, protección social y tratados medioambientales para la protección del planeta4. También, que las mujeres ayudan a crecer a las empresas, aportando mayor cooperación entre ellas, con las instituciones públicas y con la sociedad ya que ellas son más participativas y colaboradoras5. Por lo que la diversidad de género contribuye a incrementar el PIB mundial6. Además, con la educación será más fácil erradicar la pobreza y el hambre en zonas rurales. Ayudará a que las mujeres accedan a recursos, herramientas y conocimientos. Podrán ser productoras y proveedoras de alimentos, garantizando la seguridad alimentaria7.
La educación es vital para el futuro en el que las mujeres queremos estar, las niñas de hoy serán las mujeres del futuro. Pero la educación de los niños también lo es y se habla poco de su papel de hombre en el futuro, como si éste ya estuviera escrito. Gracias a la educación se permitirá un incremento en la participación de las mujeres en todos los aspectos de su vida personal y social. Siendo dueñas de sus vidas podrán intervenir en la toma de decisiones y acceso al poder que enriquece a toda la sociedad.
Si queremos una sociedad equitativa, es necesario contar con las nuevas generaciones, niñas y niños, como motor del cambio. Para ello, somos nosotras, las madres y mujeres del presente, las que ya estamos tomando la dirección de ese cambio. Estas son algunas cosas que podemos hacer para que ese barco zarpe con buen destino:
- Es importante que cuidemos nuestro potencial y autoestima.
- Estudiar (nunca es tarde) para mejorar en nuestros puestos de trabajo o para llegar a puestos con mayor liderazgo.
- Reeducarnos a nosotras mismas en igualdad y sin estereotipos de género. Nos puede ayudar mucho leer más sobre feminismo, empoderamiento femenino y mujeres que hicieron historia, esas que no nos fueron mencionadas en nuestra educación básica.
- Trabajarnos en tener una visión crítica sobre los déficits de participación de las mujeres.
- Apoyarnos entre nosotras, comprar los productos o servicios de nuestra vecina emprendedora.
- Tenernos más empatía y sororidad.
- Pedir a los hombres mayor participación en las áreas en las que escasean para que nosotras podamos ocuparnos de otras tareas. Así tendremos más tiempo para estudiar, educar mejor y emprender.
Todo esto contribuye a prevenir la violencia y la discriminación, será una inversión para nuestras pequeñas y pequeños. Somos su ejemplo y debemos enseñarles que hay un futuro más equitativo y próspero. El desarrollo social, económico y sostenible con ellas, con las mujeres y niñas empoderadas, es posible.
Toma el timón, lidera tu vida.